Saltar al contenido

Miel en mi almohada

14 abril 2010

Vierto dos gotas de miel dulce sobre mi almohada de raso blanco. Dos piedras de ámbar cálido se funden y me dan su brillo, y un azulejo dorado me presta sus reflejos.

Ya tengo tus ojos.

Miras hacia mí, pero ya no los veo. Me he perdido en tu boca. Espero a que sonrías, y la deseo.

Quiero oler tu cuello, resbalar mis manos por tus hombros, mezclar nuestros alientos. Desnudarte. En vez de eso, alejo el pensamiento con un gesto. Te ríes, y me contento.

From → Literatura, Prosa

Deja un comentario

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

A %d blogueros les gusta esto: