Saltar al contenido

Capítulo 11 – Vivan los novios

18 marzo 2011

Todos los nombres y situaciones que aparecen en este post son ficticios. Todos los derechos reservados

La algarabía cesó casi de repente. El tono imperativo con el que Miguel, habitualmente tan apocado, se dirigió al siempre imperativo Juan nos sorprendió a todos. Más aún con la puesta en escena del saltito del trono. Lentamente, se deslizó tras las sillas hasta la cabecera de la mesa y se situó junto a Juan, el cual se levantó. Miguel nos miró sucesivamente con sus ojos amables de pastor alemán, estableciendo durante unos segundos un túnel óptico, focalizando sucesivamente nuestras miradas bajo los enormes arcos de sus cejas. Miró a Juan, se colocó tras de él, y dijo: Vamos a casarnos. Y lo abrazó por detrás.

Nos quedamos como merluzas en una pescadería: los ojos muy abiertos, la boca ídem y mirando en la misma dirección. Miguel lucía una mueca extraña, a medias entre una sonrisa y me he tragado un peine, algo así como un Giocondo troglodita, pero se le veía relajado. Tampoco era el tío cuyas carcajadas resonaban por las escaleras, así que era normal, dentro de lo que cabe. Juan, en cambio, parecía un puesto de cocos de feria: no podía tener la boca más abierta, ni más dientes. Y eso sí que era raro, con lo seco que era. Y más raro aún: el abrazo de Miguel le hacía una arrugas horribles en su chaqueta de lana fría, y no hizo ni el más mínimo movimiento para recomponer su estampa; lo que hace el amor.

Conforme los fluidos fueron licuándose de nuevo en nuestras arterias, volvimos a la vida.

(Yo, mirando alternativamente a Migue, Juan y a Sandra, como un pollo buscando bichitos, y más por sentirme desencadenante de la confesión que por tener algo que decir):

– Sandra, ¿tú sabías que Juaaan … ? Como si yo supiera que Migueeel

(Sandra, igual de emocionada que al bajarse de un taxi):

– Claro, es mi hermano. Lo que no sabía era que era Miguel dijo, mirando a la feliz pareja. Y les lanzó un beso.

(Manolo, dentro de su línea habitual):

– La leche, voy a tener que salir de espaldas. El cincuenta por ciento del universo masculino le taladró con una única mirada. Vale, vale, que es broma, si yoooo, yaaaa

René se había teletransportado junto a la cafetera, echaba un café, y no echaba ni puta cuenta, así que deduje que era el único que estaba enterado del romance. Lucio y Bernard hacían mohínes y se enjugaban alguna lagrimita.

Javier gritó: ¡Vivan los novios!, destapó el depósito de la taladradora e intentó lanzar hacia los homenajeados parte de su contenido. Como distaba seis metros de ellos gritó, de nuevo, ¡Vivan los novios! y me tiró los circulitos restantes en la cabeza. Para ser de letras, mucho espíritu literario no tenía, no.

El confeti y los aplausos de la troupe me sacó del pasmo: no me lo esperaba de ninguno de ambos. Y sí de René, así que estaba claro que mucho ojo para las tendencias sexuales no tenía. Igual por eso no ligaba nunca. Las declaraciones de amor propias y extrañas me habían emocionado, así que me acerqué a ellos con los brazos abiertos y los ojillos vidriosos. Juan me esperaba inmóvil, con cara guasona, como pensando ¿qué va a hacer éste? Le planté dos besos en las mejillas.

Muac. Éste, por Migue. Muac. Éste, por Sandra, cuñado. Volvió a sacar todos los dientes.

Y a Miguel:

Muac. Cabrón, me lo podías haber dicho.

¿Para qué? Contestó, ¿para que no me contaras lo simpática que es la chica esa de Loguitos dijo, haciendo con las manos el gesto de sopesar dos melones.

Giro rápido de cabeza: miro a Sandra. Giro rápido de cabeza: Sandra me mira. Apertura extrema de sendos párpados. Rubor extremo en ambos. Sandra me guiña un ojo: vas a tener que explicarme algunas cosillas. Carcajada general. Esta tía me mata.

Hijoputa, Miguel. Habrá salido del armario, pero la vergüenza se la ha dejado dentro.

— Continuará —

Deja un comentario

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

A %d blogueros les gusta esto: